Así lo indicó, el director de la Inspección de Tránsito y Transporte de Barrancabermeja, Alberto Cotes Acosta, sobre los hechos presentados durante el fin de semana donde un conductor de un vehículo particular se movilizaba sobre la Carrera 36 al parecer, en avanzado estado de embriaguez.

“No se quiso practicar la prueba, no se pudo determinar en qué estado está pero se le nota a simple vista que está en estado de alicoramiento, imagínese si ese señor provoca un accidente, atropella a alguien, estrella a alguien, los ciudadanos tienen que tomar conciencia de que este tipo de actitudes no podemos seguir permitiéndolas en las calles” argumentó Cotes Acosta.

En compañía de la Policía Nacional, los agentes de tránsito que atendieron el caso, en vista que el conductor no se decidió a practicarse la prueba de alcoholemia, como vigilantes de la seguridad ciudadana en las vías, inmovilizaron el vehículo.

“iniciamos el procedimiento administrativo y como dice la norma si se niega a hacerse la prueba, se impondrá la máxima sanción, que es la pérdida de la licencia y una multa cercana a los 33 millones de pesos” enfatizó el jefe de la institución.

El hombre reaccionó de forma violenta contra un agente de tránsito reflejando así un caso más de intolerancia y la irresponsabilidad sobre la mezcla del alcohol con la gasolina.

“Necesitamos de la ayuda de la fuerza de la Policía porque estando ahí la Policía y casi agrede a uno de mis funcionarios cuando no está la Policía es bastante complicado que los ciudadanos entiendan que lo que estamos haciendo es protegiéndole la vida” puntualizó el director del ente descentralizado.

La Inspección de Tránsito y Transporte de Barrancabermeja reitera el llamado a los usuarios de la vía para que en el momento de ingerir alcohol es mejor buscar un conductor elegido.